El canciller austriaco Karl Nehammer ha visitado la ciudad de Bucha, que está en el centro de las denuncias de crímenes de guerra que habrían cometido los rusos. Nehammer ha pedido tras reunirse con el presidente ucraniano Volodímir Zelenski una investigación de la ONU sobre estas violaciones, «que la justicia internacional comience su trabajo. Es bien sabido que la maquinaria de legal internacional avanza lentamente, pero lo hace de forma continua y de manera persistente, y eso es lo que está ocurriendo en este momento».
Nehammer ha prometido que la Unión Europea seguirá endureciendo las sanciones contra Rusia «hasta que la guerra termine» y que el paquete de sanciones impuesto esta semana no será el último.
_»Somos militarmente neutrales, pero no somos neutrales cuando se trata de denunciar los crímenes y también cuando se trata de la necesidad de investig_ar», ha destacado el canciller.
Nehammer ha seguido diciendo que el personal de la embajada austriaca situado en el oeste de Ucrania volvería a Kiev. Los diplomáticos austriacos fueron trasladados a un puesto de avanzada cerca de la frontera que limita con Eslovaquia, en el extremo occidental de Ucrania, cuando comenzó la guerra.
Se reunirá con Putin en Moscú
El jefe del Gobierno austríaco, el conservador Karl Nehammer, se reunirá mañana lunes en Moscú con el presidente ruso, Vladímir Putin, en un encuentro con el que, según anunció hoy, quiere impulsar el dialogo entre Rusia y Ucrania y señalar los crímenes de guerra cometidos por Moscú.
El canciller señaló que está decidido a «hacer todo lo que esté su mano para garantizar que se den pasos hacia la paz», informa la agencia APA.
Con todo, admitió que las posibilidades de tener éxito son escasas.