El obispo de Guasdualito, mediante un comunicado expresa su “fuerte preocupación y la de todos los sacerdotes, religiosos y comunidades cristianas de la diócesis de Guasdualito, por los lamentables acontecimientos que se han venido suscitando en los últimos días en varias comunidades de la parroquia eclesiástica San Francisco de Asís, tanto en el pueblo de La Victoria del Estado Apure, como en zonas aledañas”.
Los enfrentamientos que comenzaron hace unas dos semanas, han generado el desplazamiento forzado de más de cuatro mil personas hacia Colombia, por ello, Monseñor González “como obispo, representante de la iglesia católica, le hago llegar mi saludo y solidaridad a todas las personas que habitan en esta región, asegurándole mi oración y mi disponibilidad para cualquier modo de apoyo institucional”.
Dios quiere que defendamos la vida
“Dios quiere que defendamos la vida y que busquemos caminos de entendimiento que posibiliten la dignidad de todos, no quiere que se imponga la paz desde la violencia. Sé que todos los actores de esta contienda creen en Dios y acuden a su cuidado en todo momento”, acotó.
El prelado hace un llamado a las partes en conflicto a buscar “caminos de entendimiento que posibiliten la dignidad de todos”, por lo que acude a “la sensatez para crear caminos de solución, sin derramamiento de sangre, sobre todo en los lugareños que siendo personas sencillas y de reconocido compromiso con la producción agropecuaria, muchas veces, son las principales víctimas de estos eventos”.